¡Qué putada, Enrique!

A la memoria de Enrique del Pino Esta mañana me despierta Isabel con la noticia de tu fallecimiento ¡maldito inicio de día! Te juro que tardé minutos en reaccionar y, cuando finalmente lo hice, apenas contesté a Isabel que quizás para romper la confusión en la que tu fallecimiento me había sumido, me recordaba que hoy hacía la tira de años que nos habíamos casado.No sé de tu familia ni puedo contactar con ella para transmitirle mi muy sincero pesar, tampoco deseo saber la razón de lo ocurrido, sería...